Tomemos en cuenta que hace algunos años la revolución educativa ya demarcaba la tendencia de la educación en línea. Desde el 2008 algunas universidades canadienses comenzaron a introducir cursos masivos en línea que poco a poco y con se fueron expandiendo con mucho éxito. Actualmente, y con todo lo que hemos pasado a nivel mundial, la educación en línea ya no es una opción y tiene que formar parte del proceso educativo como algo que “debe” suceder, no solo por los requerimientos del confinamiento social debido a la pandemia, sino también por el hecho de que vivimos en un mundo globalizado que tecnológicamente avanza a pasos agigantados. Sin embargo, como todo lo que es innovador, tiene sus ventajas y desventajas ya que todo debe pasar por un proceso de adaptación. Lo importante es que no rechaces las transformaciones y que saques el mayor provecho de las ventajas y conozcas las desventajas para que encuentres formas alternativas de cubrir esos vacíos o puntos ciegos. Así que pon atención a estos pros y contras que te comparto.
Es definitivo, nuestra sociedad ya es tecnológica y las respuestas en la educación escolar que necesitamos ante el aislamiento social, requieren también procesos de adaptación que deben ser muy rápidos. Así que desarrollar las destrezas tecnológicas, forma parte de algo necesario para un cambio drástico pero también muy necesario.
El home schooling tomó mucha más fuerza con el confinamiento, lo cual también implica un reto para muchas madres en la modalidad de las clases en línea, quienes prácticamente toman las clases junto con sus hijos pequeños y le dan un seguimiento muy cercano. Este desafío también reta a las madres a desarrollas sus propias destrezas tecnológicas.Puede ser una ventaja muy importante, o no, todo depende del cristal con que lo mires.
Karina Suárez Fernández
Mamas Latinas
