No hay edad para estudiar en línea

No hay edad para estudiar en línea

No hay edad para aprender cuando se tiene interés y voluntad para hacerlo.  ¿Acaso la universidad es sólo para jóvenes?

La respuesta es, no. Es cierto que la mayoría de alumnos de las universidades tienen una edad que va de los 18 a los 25 años; sin embargo, las universidades son instituciones abiertas a todas aquellas personas que cumplan con sus requisitos.

Las personas con cierta edad (digamos, que tienen de 30 a 40 años) que no han estudiado una carrera tienden a creer que ya nunca van a poder hacerlo. Quizá por su trabajo, falta de ingresos o las obligaciones diarias lo impiden pero, si no es así, no hay razón para pensar eso. A continuación te mostramos 3 razones para estudiar una carrera universitaria en línea,  a cualquier edad.

  1. Autoestima: Demostrarnos a nosotros mismos que somos capaces de conseguir capacidades como cualquier estudiante recién salido de la escuela. Si de verdad quieres cumplir con el sueño de estudiar una carrera, que la edad no sea lo que te lo impida.
  2. Seguir actualizándose: Actualmente es necesario estar siempre actualizándose en los estudios y seguir formándose. Muchas personas creen que la formación termina en el momento que se termina la carrera o se encuentra trabajo, cuando la realidad es que siempre hay estudios que nos pueden llevar a un nivel superior personal y laboral.
  1. Ahorrar tiempo y dinero: Piensa todo el tiempo que ahorrarás en desplazarte de un lugar a otro, paradas de autobús, horas de estrés en el tráfico, entre muchos otros. Ya no tendrás que sufrir por todo esto que mencionamos. ¿Trabajas? ¿Rindes más por la mañana o por la noche? Al estudiar en línea podrás hacerlo cuando tengas oportunidad, sin dejar de lado tus actividades diarias. Además, al estudiar en línea tendrás menos gastos en libros, materiales y transporte. Ahora puedes descargar todo lo que necesites.

Al final del día, recuerda que emprender una carrera siempre será un estímulo que te motive a alcanzar tu desarrollo personal y profesional. Y, por supuesto, nunca dejes que el temor, la inseguridad o las dudas te impidan estudiar si es lo que deseas.